Enfrentamientos entre militares y traficantes dejan 12 muertos en Río

Las operaciones policiales y militares en Río de Janeiro dejaron ayer al menos doce muertos, entre ellos un soldado, el primero que cae desde el inicio de la intervención militar en febrero pasado de este estado brasileño.

Al menos 5 personas fueron abatidas en las favelas del Complexo de Alemao, la Maré y en el cercano barrio de Penha, durante una operación de 4.200 soldados, apoyados por 70 policías, informó el Comando Militar, que previamente había dado parte de 8 muertos. Entre el vaivén de comunicados, el comando confirmó que un militar del Ejército falleció por heridas producidas por armas de fuego en ese operativo y que otro fue hospitalizado sin mayor gravedad, mientras que una averiguación policial será abierta para investigar las circunstancias. Este es el primer soldado que muere desde que el presidente Michel Temer decretó la polémica intervención militar del área de seguridad de Río, que vive una ola de violencia desatada después de los Juegos Olímpicos de 2016, con tiroteos constantes entre facciones de narcotraficantes y choques entre estos y la Policía en las empobrecidas favelas.

Las Fuerzas Armadas resaltaron en un comunicado el supremo sacrificio de esos militares en su misión de proporcionar un ambiente seguro y estable a los habitantes del Estado de Río de Janeiro.

Otros 6 presuntos delincuentes fueron abatidos por la Policía en la zona metropolitana de Niteroi. Aparentemente, supuestos traficantes estaban regresando en 2 carros robados de una fiesta en una de las favelas de la región, cuando decidieron robar otro vehículo, reportó la estatal Agencia Brasil. “Nueve criminales fueron baleados. Cuatro murieron en el lugar, 2 en el hospital y 3 fueron detenidos”, dijo la PM en Twitter, informando también del decomiso de 4 fusiles, 4 pistolas, 4 granadas y 7 radiotransmisores. La Policía los cercó con un carro blindado en uno de los accesos del puente que conecta Río con Niteroi, donde hubo un intenso tiroteo que incluso alcanzó a un autobús de pasajeros. El Comando Militar a cargo de la seguridad de la segunda mayor ciudad de Brasil informó más temprano que el objetivo del operativo era cercar las comunidades, quitar barricadas en las calles colocadas por los traficantes, controlar vehículos y vecinos y atender denuncias especialmente sobre los grupos de narcotraficantes.