Ella sintió nuestros primeros latidos en su vientre, sufrió el parto para que veamos la luz y nos amó antes de conocernos. Las mamás son las únicas personas que nos regalan su magia sin condiciones, es por eso que cada 15 de mayo las recordamos con amor.

Veinticuatro horas no bastan para agradecer todo lo que nuestras madres hacen y siguen haciendo por nosotros; ellas fueron las únicas personas que, desde un principio, nos amaron más que nadie en la Tierra. Cada 15 de mayo, en coincidencia con el Día de la Independencia Nacional, celebramos con la reina de la casa su día.

No existe una palabra para agradecer a la mujer que nos dio sus brazos como escudo al nacer, por enseñarnos el significado de lo que es amar a alguien, por prepararnos el desayuno, el almuerzo y la cena todos los días, aunque esté cansada. Es imposible no expresarse de forma cursi cuando se trata de una madre.

Mamá es la mujer que fingiría no tener hambre para darle el último pedazo de comida a su hijo, la que cruzaría nadando los siete mares para encontrar la solución de un problema, la señora que, a pesar de que algún día dejará la Tierra, nos amará siempre.

La madre es el eje de la vida de un hijo y viceversa, pues todo lo que ella nos brindó lo recordamos con mucha nostalgia. Cuando nos sentíamos mal, las mamis siempre guardaban un remedio casero bajo la manga y cómo dejar pasar sus “yo te dije luego” cuando no escuchamos sus acertadas advertencias.

El rol de médica, adivina y protectora que cumplen las madres debe ser festejado todos los días, pasando tiempo con ellas, dándoles un abrazo de oso inesperado, pero no solo cuando te compra eso que tanto le pediste. Al fin y al cabo, lo que ellas quieren es que nunca sean olvidadas y sentir el amor profundo de sus hijos.

¿Hace cuánto que no le decís a tu mamá “te quiero” o “te amo, mami”? Tal vez, después de niño, dejamos de lado ser mamitis, queriendo “libertad” y olvidamos lo valioso que es pasar tiempo y compartir recuerdos con la mujer que nos dio la vida.

Muchas tías y abuelas tienen la función hogareña de ser mamás, ya que por cosas de la vida las verdaderas se adelantaron para pasar a mejor vida o eligieron otro camino. Este martes, también es el día de todas esas mujeres quienes, de corazón, cumplen el papel de mami; una frase expresa: “Madre no es la que engendra sino la que cría y ama”.

Este 15, el mejor obsequio para mamá no es un electrodoméstico ni flores, sino regalarle el orgullo de que nos vea crecer y salir adelante, pues el sueño de ella es el mejor futuro para nosotros, sus hijos.

Felicidades Mamá!!!