Mbappé, ante la garra charrúa

Uruguay y Francia darán el pistoletazo de salida de los cuartos de final en un duelo marcado por el buen momento de Kylian Mbappé y la posible ausencia de Edinson Cavani. El referente charrúa en ataque será Luis Suárez.

Argentina, con un sistema caótico, fue una pista de atletismo para Mbappé, que casi él solo acabó con el combinado de Jorge Sampaoli en octavos de final.

Primero, en una carrera monumental de velocista con la que provocó el penal que abrió el partido. Después, con dos goles que enterraron al cuadro albiceleste. Pero en cuartos, Mbappé quiere más. Está en el camino hacia la gloria y parece que nadie puede frenarle. Nadie excepto Uruguay, que sólo ha recibido un gol en cuatro partidos y presentará un sistema que no beneficiará en nada a la velocidad del jugador del PSG.

El delantero francés tendrá que enfrentarse a un equipo sólido y rocoso que consigue desquiciar a sus rivales con partidos de brega en los que apenas dejan espacios que puedan atemorizar al portero Fernando Muslera. Didier Deschamps sólo tendrá la baja por sanción de Blaise Matuidi y su relevo sería Corentin Tolisso.

“GRIEZMANN ES FRANCÉS” 

Antoine Griezmann vivirá un partido especial por su relación con Uruguay. El jugador del Atlético Madrid es un amante de la cultura charrúa. Luis Suárez, en unas declaraciones previas al choque, aparcó los piropos a un lado y declaró que Griezmann no es medio uruguayo. “Es francés”, sentenció.

Con ese espíritu combativo de Suárez, Uruguay intentará volver a las semifinales que alcanzó por última vez en Sudáfrica 2010. Y, ya de paso, tener la opción de regresar a una final que no juega desde su Mundial en 1930. En el de Brasil 1950 no tuvo una final concreta, ya que el Maracanazo era el último de la segunda fase de grupos por el título.

Edinson Cavani será duda hasta el último instante y su sustituto, si el delantero del París Saint-Germain no llega a tiempo, será Christian Stuani.